El Régimen de Comercio de Derechos de Emisiones (ETS por sus siglas en inglés) está en problemas – serios problemas. En esto, muchos analistas, legisladores, políticos, comercializadores de carbono, industrias contaminantes y ONGs están de acuerdo. A la hora del diagnóstico de las causas detrás de los síntomas, las prescripciones o qué hacer con el paciente enfermo, las opiniones son divergentes. Como se señala en la declaración “Es hora de desmantelar el ETS”, nuestra investigación del ETS de la UE concluye que lejos de ser “el instrumento más efectivo en las políticas contra el cambio climático en Europa” el ETS ha demostrado ser el mayor obstáculo para una acción climática efectiva – y por lo tanto, debe ser abolido.
A partir de las respuestas a la declaración “Es hora de desmantelar el ETS”, muchos están de acuerdo con el análisis, sin embargo aún dudan si unirse al llamado a finalizar el ETS. A continuación, exploramos las tres preocupaciones más comunes:
1. Llamar a desmantelar el ETS significa alinearse con las industrias de combustib fósi y con los que niegan el cambio climático, quienes llaman también a rechazar las propuestas para retener los permisos del ETS
Es útil observar quién está haciendo incidencia para que el ETS sea rescatado. Compañías que incluyen a Shell, Statoil, la Asociación para la tecnología de almacenamiento y captura de carbono (CCS por sus siglas en inglés), E.On and Électricité de Francia, se han alineado para apoyar los esfuerzos de la UE para rescatar el ETS, de la mano de actores financieros, es como los comercializadores de carbono, brokers y firmas de auditoría. Estas son compañías que se benefician de la venta o uso de combustib fósi y del comercio de carbono y, por lo tanto, desean que se restablezca la confianza en el fallido mercado. Obviamente, ellos Darse de baja de la lista: %1$stán incidiendo por reducciones significativas de emisiones o por cambios estructura que puedan acabar con el uso industrial de combustib fósi.
En contraste, la declaración “Es hora de desmantelar el ETS” también llama a establecer políticas y acciones para transformar la infraestructura de energía de la UE y por un fin al uso industrial de combustib fósi. Si hablamos seriamente acerca de detener la “mayor amenaza para la humanidad en el siglo XXI”, como es descrito frecuentemente el cambio climático, los criterios deben ir más allá de los encabezados y concentrarse en desarrollar acciones que realmente reduzcan las emisiones para una transición socialmente justa.
La UE tiene el objetivo claro de limitar el incremento global de la temperatura a 2°C. Lograr esto implicaría alcanzar rápidamente una etapa de eliminación gradual del uso de combustib fósi, y una finalización a la nueva generación de energía de carbón en la UE. Esto significaría también implementar políticas fuertes para que los contaminantes reduzcan sus emisiones desde su fuente sin ninguna “flexibilidad” que permita incumplir sus obligaciones. Los últimos siete años han demostrado que el ETS es incapaz de ayudar a realizar este tipo de transformación. Llamar a que el ETS se desmantele es reconocer que el carbón debe permanecer bajo el suelo y el petróleo bajo tierra – de acuerdo con la el Reporte Mundial de Energía de 2013 de la IEA (Agencia Internacional de Energía), al menos el 70% de las reservas conocidas de combustib fósi deben permanecer donde están para que la meta de 2°C sea una opción remota[i]. Por el contrario, el ETS en lugar de ayudar a la transición hacia una economía post-carbono, ha subsidiado a los contaminantes con ganancias extraordinarias que producen aún más contaminación y emisiones de gases de efecto invernadero.[ii]
2. El ETS es la única opción factible existente para detener el cambio climático
Durante siete años hemos escuchado que el comercio de carboDarse de baja de la lista: %1$s la “única opción”. Sin embargo, con una observación más en dele, el ETS se ha convertido en el mayor obstáculo para una acción transformativa frente al cambio climático en la UE. La existencia del ETS ha alimentado la ilusión de que los instrumentos basados en el mercado, enfocados en la fijación de precios, pueden desencadenar los cambios necesarios para transformar nuestra infraestructura energética y la forma en que nuestras economías producen y consumen bienes. Semejante cambio nunca ha sido generado por un instrumento de mercado.[iii]
El mantra del mercado neoliberal en la UE ha respaldado ciegamente el ETS bloqueando cualquier discusión sobre las políticas que funcionan frente al clima en los últimos siete años. Peor aún, el ETS ha debilitado activamente políticas como la Directiva sobre Eficiencia Energética, la Directiva sobre Grandes Insaciones de Combustión y ha retenido la implementación de iniciativas es como las tarifas de alimentación energética[iv].
Ello ha producido beneficios inesperados asombrosos para los mayores contaminantes de Europa[v] abiertos beneficios que probablemente han financiado a profundidad el uso de combustib fósi y no una transición a una economía post-carbono. Con el fin de resolver seriamente el cambio climático, necesitamos atacar la causa original –exceso de quema de combustib fósi- y no apuntar al mantenimiento por parte de la UE de un esquema que permite a los contaminadores y a los “creadores de mercados” financieros y especuladores moverse de permisos de emisiones mientras producen ganancias caídas del cielo sin hacer ninguna contribución significativa para detener el cambio climático fuera de control. Llegó la hora de comenzar a avanzar hacia una transformación justa de nuestra producción y consumo de energía lejos de la dependencia de combustib fósi, especialmente en países industrializados, regulando a los emisores de manera que se asegure una reducción de las emisiones en su origen.
El ETS es un ejemplo de cómo la regulación que funcionaría para el clima ha sido desplazada a favor de una regulación que favorece mecanismos de mercado no probados. Las industrias han hecho cabildeo durante años para evitar una acción real, oponiéndose fuertemente a cualquier política que los obligue a reducir emisiones en el origen. Abolir el ETS es, por lo tanto, desesperadamente necesario para crear espacio y permitir el comienzo de una transición real. También debe ser abolido para contrarrestar la dependencia peligrosa en mecanismos de “libre mercado” para otras áreas diferentes al carbono, como biodiversidad o agua.
3. Desmantelar el ETS será visto como una falla de la política climática de la UE. Esto sería dañino para las negociaciones internaciona de clima que están enfrentando s dificultades como están, haciendo aún más difícil cualquier futura acción internacional para detener el cambio climático .
Mantener una política fallida será – y en su momento también será visto como- un fracaso de la política climática de la UE y perjudicará la credibilidad de la UE. Desmantelar el ETS ahora, reconociendo que el experimento no funcionó como se esperaba y reemplazándolo por una acción que genere una transición justa fuera de la dependencia de los combustib fósi y deje a las futuras generaciones con una oportunidad justa de evitar un incontrolable cambio climático, será visto como un éxito. Mantener un “experimento” cuando las fallas son tan evidentes es incomprensible. ”Ampliar“ la falla y financiar su exportación a otros países como Vietnam y México y a otras áreas de la naturaleza como bosques, biodiversidad y agua, conociendo los peligros que ello conlleva, es imprudente.
La propuesta de backloading ha sido reconocida por muchos de sus proponentes como un esquema irrelevante en relación con sus efectos en el precio.[vi] Más y más actores financieros que eran supuestos “creadores de mercado”- Deutsche Bank, Morgan Stanley, Credit Agricole, Barclays – están reduciendo o cerrando sus actividades en el comercio de carbono. Es ridículo suponer que posponiendo las subastas de cerca de 900 millones en certificados arreglar un mercado que ha sido descrito como un régimen en estado de “caos to” [vii]. Retener estos permisos no empujará el precio de los créditos de carbono de por debajo de los 5 euros a los 30-50 euros que sería lo que es ampliamente considerado como el mínimo para servir como señal contra la inversión a gran escala en proyectos de infraestructura energética a base de combustib fósi. Aún más, no hay evidencia histórica que sugiera que el precio pueda ocasionar este tipo de cambio necesario para la transición hacia economías más allá de los combustib fósi. En resumen, “Es hora de desmantelar el ETS!”
[i] Carbon Tracker Initiative (2012) Unburnable Carbon – Are the world’s financial markets carrying a carbon bubble?, Marzo 2012, www.carbontracker.org/
[ii] Bruyn, S. et al. (2010) Does the energy intensive industry obtain windfall profits through the EU ETS? CE Delft,www.ce.nl/publicatie/does_the_
[iii] Lipow, G. (2012:) Solving the Climate Crisis through Social Change. Public Investment in social prosperity to cool a fevered planet, Praeger: US. / Food and Water Watch Europe (2012), Pollution Trading abiertos Cashing Out Our Clean Air and Water, http://documents.
[v] CTW y CEO (2012) EU Emissions Trading System: failing at the third attempt. www.carbontradewatch.org/
[vi] “Backloading will keep the market ticking,” Davies said. “It’s a tiny proposal … (that) will effectively have no consequence on investment or profitability for energy intensive industries.” en: Point Carbon: EU CO2 market fix hangs in balance after MEPs urge rejection. 24 Enero 2013, http://www.pointcarbon.com/
[vii] Point Carbon: EU CO2 scheme a “regulatory omnishamb”: Barclays. 19 Nov 2012.www.pointcarbon.com