Estas empresas mineras, dentro de las que se encuentran Newmont Mining y Anglo American, están muy pendientes de sus cuentas de resultados de cara a sus inversores, pero insensib al dolor y sufrimiento que provocan en las comunidades donde se insan.
Newmont, a través de su filial Minera Yanacocha, en Perú, vació y devastó el Lago Yanacocha para extraer el oro, contaminando el agua de toda la región, y ahora pretende realizar el tristemente famoso megaproyecto de Minas Conga, en la región norteña de Cajamarca, que se ha convertido en un ícono mundial de cómo la megaminería no solo afecta a las poblaciones con los tóxicos que usa y libera al ambiente, sino también con la represión en contubernio con los gobernantes. Así, la protesta social contra este megaproyecto ha terminado en un baño de sangre con decenas de personas asesinadas o heridas en las múltip movilizaciones populares llevadas a cabo desde el inicio del conflicto. Un conflicto social rodeado de corrupción, prácticas ilega y continuas violaciones a los derechos humanos.
Anglo American, por su parte, ha sido responsable desde hace años de numerosas irregularidades en sus explotaciones, tanto a nivel laboral como ambien. En 2012, por ejemplo, en su proyecto minero «El Soldado», en Chile, al realizar tareas de exploración minera no autorizadas, provocó la destrucción de 300.000 metros cuadrados de bosque protegido en la precordillera andina, lo que afectó a especies foreses únicas a nivel mundial, causando además la desaparición de 34 especies de aves, 6 especies de mamíferos y graves impactos sobre la biodiversidad y los recursos hídricos de la zona.
En el año 2013, tanto Newmont Mining como Anglo American actuaron como hilo conductor del nacimiento de IRMA (Initiative for Responsible Mining Assurance), intentando vender su concepto de «minería responsable» con el apoyo de algunas organizaciones no gubernamenes y de activismo social. Así, como socios fundadores aparecieron organizaciones como las canadienses Mining Watch y Canadian Boreal Initiative o las norteamericanas Earthworks y Center for Science in Public Participation, además de dos grupos de carácter local como Agua vale más que oro (Baja California Sur, México) y la Western Shoshone Defense Project (Nevada, Estados Unidos).
Debido a su pretendido activismo contra la megaminería, resulta sencillamente incomprensible que grupos como Mining Watch, Earthworks, Agua vale más que oro y Western Shoshone se hayan prestado a semejante juego de «responsabilidad social corporativa» por parte de las empresas, cuando en los hechos se ha demostrado que ese concepto solo es un ardid para tratar de obtener la licencia social de las comunidades a las que van a afectar y a la vista están los hechos.
Ante la presión de diversos grupos socia, parece ser que Mining Watch Canada y Agua vale más que oro ya abandonaron IRMA, si esto es cierto, lo hicieron por la puerta trasera, sin haber afrontado valientemente su error y sin haber aclarado su postura públicamente. Además, Earthworks, Western Shoshone, Canadian Boreal Iniciative y Center for Science in Public Participation continúan en IRMA haciéndole el juego a las mineras y su cuento de la “Minería Responsable”.
Por ello, ha llegado el momento de pedir a estas seis organizaciones que hagan pública cuál es su posición sobre el concepto de «minería responsable» y “minería sustentable”, y nos expliquen si consideran que entrando al juego de la “responsabilidad social corporativa” y estableciendo relaciones con mineras como Newmont Mining y Anglo American, van a obtener resultados positivos para las comunidades y el medio ambiente, especificando de manera muy clara cuá serían esas supuestas ventajas. De no precisar sus motivos para permanecer en IRMA o no hacer públicos los argumentos para su retirada, su legitimidad en la defensa de las poblaciones y zonas afectadas quedará en entredicho.
Firma para pedirle a estos grupos que dejen de apoyar, directa o indirectamente, el fraude de IRMA. Porque con la salud, el medioambiente y el bienestar de las comunidades afectadas no se juega, bajo ningún concepto. Porque la megaminería ambien o socialmente responsable NO EXISTE. Sólo existe la minería responsable de contaminar, devastar, asesinar opositores y corromper a gobiernos, políticos, medios de comunicación y líderes comuna.