24 septiembre de 2024 Ginebra- Quito
En una urgente llamada a la acción, una alianza ad hoc de organizaciones internacionales que representan a más de 300 millones de personas en todo el mundo han expresado su firme oposición a la recién decisión de la Misión de Ecuador ante la oficina de la ONU en Ginebra, que pospone lo que iba a ser la 10ª sesión de negociaciones por un tratado jurídicamente vinculante que responsabilice a las empresas transnacionales (ETNs) a rendir cuentas por sus violaciones de los derechos humanos.
La sesión, prevista inicialmente del 21 al 25 de octubre de 2024 en Ginebra, ha sido inesperadamente aplazada a finales de diciembre, causando profundas cargas logísticas y financieras a los grupos de la sociedad civil participantes, a las comunidades afectadas por las actividades de las ETNs, a los movimientos sociales y a los sindicatos. Según la Campaña Mundial para Reclamar la Soberanía de los Pueblos, Desmantelar el Poder Corporativo y Poner Fin a la Impunidad (Campaña Mundial), este es el último intento del Presidente de este proceso de la ONU, el gobierno de Ecuador, de privar de derechos a estas voces que han mantenido una presencia fuerte y decisiva durante los últimos nueve años de negociaciones.
Para Iván González, de la Confederación Sindical de Trabajadores y Trabajadoras de las Américas (CSA), esta decisión especulativa de la presidencia ecuatoriana afecta especialmente a la voz de los movimientos sociales y a los afectados del Sur Global. «Cambiar así la dinámica del proceso sólo favorece a los gobiernos del Norte y a las empresas transnacionales que buscan seguir influyendo en el ritmo de las negociaciones y en el contenido del Tratado, limitando aún más la participación social y la consideración de las demandas de los pueblos.»
En una carta dirigida a la Misión de Ecuador, país que preside el Grupo de Trabajo Intergubernamental de Composición Abierta (OEIGWG/GTTI) encargado de negociar el denominado «Tratado Vinculante», la alianza exige que se revierta esta decisión. Llaman la atención sobre la hipocresía de la medida unilateral de la Misión tras la reciente adopción en Nueva York del Pacto de las Naciones Unidas para el Futuro, que aboga por un multilateralismo revitalizado.
Según Anesu Dera, del Centro de Estudios Jurídicos Aplicados (CALS) «El traslado de estas negociaciones decisivas al mes de diciembre no sólo crea obstáculos financieros y logísticos, sino que silencia de hecho las voces de los representantes del continente africano. Muchas organizaciones de la sociedad civil, especialmente las que representan a comunidades marginadas, no podrán asistir debido al aumento de los gastos de viaje y a la coincidencia con periodos vacacionales. Esta exclusión socava la integridad del proceso, dejando fuera perspectivas esenciales para que las empresas transnacionales rindan cuentas por las violaciones de los derechos humanos.»
Esta decisión de silenciar de hecho las voces de los cientos de millones de personas representadas por estos grupos pone sin duda en tela de juicio el futuro de la ONU y sus espacios de negociación, que parecen ampliarse para las empresas y reducirse para la sociedad civil. En respuesta, grupos de todo Ecuador se reunieron para entregar en mano la carta al Ministerio de Relaciones Exteriores, que supuestamente impuso esta decisión unilateral.
Pablo Fajardo de UDAPT / Amigos de la Tierra Ecuador afirma «Los pueblos y comunidades afectados por la flagrante violación de los derechos humanos a manos de las empresas transnacionales no pueden aceptar que se obstaculice nuestra participación en las negociaciones. Nos oponemos firmemente a esta decisión totalmente antidemocrática de la Misión de Ecuador y estamos viendo la solidaridad de los pueblos junto con movimientos sociales, organizaciones y sindicatos de todo el mundo para exigir que la Misión revierta esta decisión.»
Nota a los redactores
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Ghislaine Fandel, ghislaine@foei.org
